No me he olvidado de vosotros, he tenido un par de meses de mucho trabajo —sin dejar de croquetear mientras tanto— y aquí estoy de vuelta.
Acompáñame en esta Ruta de Croquetas, hoy te llevo por La Latina. No se trata de un sitio nuevo, si no de un restaurante que ya conocía por su cocina y en concreto por sus excelentes croquetas. Ya iba tocando volver para comprobar si mantenía la calidad, ya que de por medio ha habido un cambio de dueños.
Aunque la oferta croquetera en Madrid es tan amplia que bien podrías visitar un sitio diferente cada día, me gusta volver cada cierto tiempo a los sitios que os recomiendo para confirmar si siguen manteniendo la calidad, y de paso para darme un homenaje. Aunque esto me lleve en más de una ocasión a decepciones.
La Chusquery es una taberna madrileña con una primera zona de barra y un salón no muy grande al fondo, todo en un mismo espacio.

Cocina creativa que cuida las materias primas, en constante evolución. Lo descubrí en sus inicios (2015), cuando Ángel Jiménez y los hermanos Roberto y Sergio Hernández lo regentaban. Con el cambio de dueños y chef, nació mi curiosidad para regresar antes de subir post, para recomendaros con conocimiento de causa, me tomo muy en serio las recomendaciones que os hago, soy una croqueta perfeccionista jajaja

Pues bien… ¿Cambios? Los hay, solo tenéis que ver las fotos inferiores de las croquetas. La primera es de su croqueta en 2015 y la segunda de su croqueta actual (2017). Se puede apreciar a simple vista una bechamel menos líquida. De sabor ambas muy buenas, aunque recuerdo un mejor sabor e intensidad en sus inicios. El servicio también ha cambiado, es más seco, a mejorar, sonreir un poco más no cuesta nada y te endulzan las croquetas.

Pero centrémonos en sus croquetas actuales, aunque añoremos un poquito las primeras. Actualmente las croquetas de jamón de La Chusquery se pueden definir como muy buenas, aunque sabiendo que en un tiempo fueron perfectas —para mi gusto—, no puedo darles el 10, añoro aquellas que probé en su momento, llámame nostálgico.

Sus croquetas caseras de jamón ibérico son de buen tamaño. Con un rebozado crujiente que aguanta de principio a fin (5/5). Pelotitas de placer con una bechamel melosa e intensa de sabor (4/5), notas ese sabor a jamón, lleva una parte de caldo en su bechamel, aportándole más intensidad. Bien de tropezones de jamón ibérico (5/5).
Recomendación: En esta última visita no he probado más de su carta, hice un paradda rápida. Aunque recuerdo con mucho cariño su bocadillo de panceta bao y su tataki de pez mantequilla. Su brownie de chocolate era espectacular, mezcla con coulant, si lo mantienen no puedes marcharte sin probarlo. Me han comentado que en noviembre van a hacer una croqueta diferente, así que te animo a pasarte.
INFORMACIÓN:
C/ de los Mancebos, 2. Metro: La Latina
Precio: 1,40€/ud
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